Si bien el Lampo está inspirado en el concept más delirante de la historia de Fiat y es un homenaje al Turbina, poco tiene del original heredando sólo su estética: la decoración corrió por cuenta de Garage Italian Customs (G.I.C.), el emprendimiento privado de Lapo Elkann, el accionista de Fiat Chrysler Automóviles.

Elkann, además nieto de Giovanni Agnelli y primo segundo de Cristiano Rattazzi, encaró este proyecto junto al argentino Horacio Pagani con el fin de poder vender el Pagani Huayra Lampo en su exclusivo showroom. Sin embargo, al parecer esto no sucederá ya que la preferencia de Elkann será conservar esta unidad única.

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